El Palacio de Justicia andaluz se encuentra emplazado en un barrio del Noroeste de esta ciudad. Este es un proyecto de Mecanoo Architecten + AYESA. Ocupa una superficie de cuarenta y ocho mil metros cuadrados.
El edificio exhibe un carácter muy escultórico. Se trata de un volumen compacto perforado por rasgaduras y vacíos. Su estructura tiene forma de rompecabezas. El edificio se eleva dos metros por encima de la calle y su acceso es a través de la plaza de entrada inclinada.
Las fachadas exteriores son de hormigón reforzado con fibra de vidrio. Los patios muestran un revestimiento cerámico dorado que actúa como una doble piel, suavizando la entrada de luz. En los paños de hormigón, la luz traspasa por las perforaciones y huecos geométricos.
El edificio se encuentra dividido en varios departamentos independientes, esto requiere varias entradas. Se puede ingresar al mismo desde la plaza de entrada principal o desde pequeños patios ubicados a lo largo de los tres lados del edificio.
A partir de la entrada principal puede apreciarse la organización interior. Una columna vertebral origina un eje de circulación que conecta los distintos espacios. Incluye varios pisos y articula los distintos departamentos. Incluso conecta la circulación pública con los patios.
A nivel de la plaza, el palacio posee una planta baja abierta con las secciones más públicas, como salas de audiencia, registro de matrimonio y restaurante. Las funciones internas se vuelven más privadas hacia los niveles más altos. Las oficinas de alta seguridad se sitúan fuera de los patios superiores y los archivos y las celdas se hallan debajo del nivel del suelo.
En el interior predomina el color blanco, matizado por ciertos acabados en madera. Desde el corredor principal se tienen visuales sobre los patios exteriores. Las perforaciones de los cerramientos y los lucernarios bañan de luz el interior, que destella en todos los paramentos, suelos, techos, muros y particiones.